godaddy

sábado, 10 de abril de 2010

MENSAJE EN LA BOTELLA

Siento como si estuviera enviando un mensaje dentro de una botella, arrojándolo al ir y venir de las olas. No sé dónde será leído este mensaje. Deseo que quien lo lea sea una persona de buenos sentimientos, que aprecie la amistad y la compañía. Que quiera compartir gustos afines. Que no se conforme con contestar este aviso, sino que sea capaz de brindar una amistad real. Lo que ofrezco es una amistad en el plano real, alejado de los contactos puramente virtuales y cibernéticos. Soy un ser pensante, cargado de emociones positivas, capaz de compartir vivencias, deseos y fantasías. Espero que el mensaje no se quede encerrado en la botella, y al leerlo,te entusiasme la idea de responderlo.

FANTASIA EN BUENOS AIRES

Caen las hojas. Es de mañana. El sol se asoma
tímidamente entre los techos.
Amanece en Buenos Aires.
Se respira ese airecito,...
Se escucha ese rumor....
Se habla en voz baja.....
Terminó el desayuno y la humanidad parece
adormecida.
Las hojas caerán.
Las ramas vestirán el luto.
Volverá la primavera, con la vida,el verde, el sol....
El canto cadencioso del otoño quedará olvidado
en el recodo de un camino.
Volveré a nacer en primavera, y me prepararé
para un verano de soles y lunas. De noches
estrelladas y playas somnolientas.
Abriré surcos en los campos del mundo, con el
amor que llevo dentro.
Sembraré a los cuatro vientos, y la semilla la
llevaré hasta el cenit. La aurora boreal extenderá
su manto a mi paso.
Reinaré en el verano, bajo el sol y la luna,
portando un manto bordado de estrellas.
Seré Eclipse, en el juego del señor sol y doña luna.
Surgiré entre las cenizas, como el ave fénix, desplegando
sus alas.
Tú estarás allí, contemplándome.

HOLA, GAVIOTA....

Detuve mi barca en una playa solitaria, y me recosté
en la arena, escuchando el murmullo del viento y las
olas.
De tanto en tanto me despertaba el aleteo de una gaviota.
La marea empezaba a subir, y por la posición del sol deduje
que estarías cerca.
Era ya entrada la tarde y el sonido de tus pasos aun no se
escuchaba en la escalera de piedra.
Me senté mirando al horizonte y canté bajito, bajito, una canción
de cuna que me enseñó mi madre.
Las aguas seguían subiendo y aun no llegabas.
Subí a mi barca y volví a mi rutina, sin escuchar tu voz.
Llegó la noche, tendiendo su manto agujereado por las estrellas.
Solo, en mi barca, miro el cielo y medito.
Elevo una oración por esa gaviota que el verano trajo a mi playa.

YO SOY RAIZ

Yo soy raíz.
Tú eres tallo.
No quisiera secarme,
encerrado
aquí abajo.
Eres parte de mí.
Si alguno de tus brazos se secara,
yo me iría muriendo.
Si tú te secaras,
yo moriría a tu lado.
Tu crecimiento
es también el mío,
aunque no me veas,
por estar escondido.
Si tú murieras,
yo moriría contigo.

HASTIO

Nubes opacas de escarnio.
Besos concupiscentes sobre el metal.
La daga azul se mueve,
contra el tiempo raído del ayer.
Centelleantes delirios amargos
rechinan en la cibernética.
Tu rostro
emite fulgores rosados,
y el gato gris
besa la tarde muerta.

MUERTE

Denso metal en sus ojos.
Moho insomne, laminado,
en el rostro radial.
Luz detersiva anti-todo,
ilumina la faz existencial.
Los pájaros transparentes
de la ceremonia hilarante
descansan,
con húmeda cadencia.
Terror apocalíptico,
de nube sin luz.
Discordia primaveral
en el seno de la tierra.
Crepúsculo impertérrito,
de cálida visión.
Manos trepidantes,
en el fuego ezquizoide.
Las sombras mortecinas
tiemblan de ansiedad.
La tierra del cementerio
cae sobre el féretro.
Los sintetizadores ríen,
mientras roen la tarde.
El ímpetu del volcán
quedó sepultado.
Los gusanos rutilantes
danzan enloquecidos.
El luto claroscuro
se aleja, silencioso,
por la calle vencida.
Trepan los recuerdos,
como hiedra tangencial.
Los encendidos aromos
desvanecen
la mística ilusión.

REGRESO

Irse y volver.
Volver a empezar.
Volver a cruzar la misma puerta,
de la misma casa.
Encontrar la misma pieza
con los mismos recuerdos
de tiempos añejos.
Soñar en despertar,
en un día azul;
un día sin nubes,
y sin el dolor
de saber que ya no estás.
Soñar con que vendrás
un día de abril;
un día como otros mil,...
que sé que no será.
Irse y volver.
Volver a entrar
y comprobar
que aún no estás.
Vivir,
volver,
soñar,
despertar,
amar.